Sabiduría - Enrique Bunbury

Sabiduría Esquire: Enrique Bunbury

"Me identifico con cantantes como Elvis Presley o David Bowie" y más nos dijo el músico español en entrevista

Mi primer recuerdo musical es de cuando tenía alrededor de seis años, es de una película de Elvis Presley que vi por televisión; se llamaba King Creole.

Cuando quise aprender a tocar la guitarra, mis padres me trajeron un maestro a casa que me enseñó los primeros acordes; después, todo lo aprendí por mí mismo.

Mis primeras influencias musicales provienen de las cintas que nos grababa un tío muy aficionado a la música. Nos regaló la discografía de The Beatles, discos de The Rolling Stones, Pink Floyd y Santana.

Una cosa es querer ser músico y otra es darse cuenta de que es posible. Yo quise ser músico desde los 12 o 13 años, pero me di cuenta de que era posible hasta mucho después, cuando sacamos el primer álbum de Héroes del Silencio (El mar no cesa, 1988) y fue un éxito.

Me identifico con cantantes como Elvis Presley o David Bowie que son muy teatrales, y con intérpretes españoles como Nino Bravo y Raphael.

En 1989, en un pueblo de la provincia de Zaragoza, el entonces mánager de Héroes del Silencio trajo a Phil Manzanera (productor de David Gilmour, Fito Páez y el propio Bunbury en su etapa como solista) y nos lo presentó. Le gustó mucho el concierto que dimos y hablamos de grabar un disco; finalmente, gracias a ese encuentro, grabamos juntos Senderos de traición (1990).

A Bob Ezrin (productor de Pink Floyd, Peter Gabriel, Lou Reed y Kiss, entre otros) le escribimos una carta muy emotiva cuando estábamos preparando un nuevo disco, pensando que nunca nos iba a responder. Que lo hiciera y además que quisiera colaborar con nosotros fue fundamental para la banda, porque en ese tiempo Héroes del Silencio pasaban por un momento crítico, sin mánager, viviendo en Londres y en problemas con la disquera. Finalmente, Ezrin trabajó con nosotros en Avalancha (1995) que termino siendo un disco muy importante en la carrera del grupo.

Las ideas que realicé en Radical Sonora (1997), mi primer disco solista, fueron mucho mas amplias y radicales que las que le propuse al grupo por esos tiempos.

Si mi intención era empezar una carrera de investigación de lugares y sonidos diferentes a los que había realizado con Héroes del Silencio, en algún momento tenía que dar el puñetazo sobre la mesa. Tenía que mostrarle al público que mi carrera de solista no iba a ser en nada parecida a lo que venía haciendo con el grupo.

Tal vez Radical Sonora fue una propuesta demasiado radical y distinta en su momento, pero yo le estoy muy agradecido a ese disco porque, gracias a él, he podido hacer todo lo demás a lo largo de mi carrera de solista.

Cuando llegué a México la gente me decía Licenciado Bunbury, lo cual me hacía mucha gracia porque yo nunca me licencié en nada.

Cuando pienso en el nombre del disco que estoy promocionando (Licenciado Cantinas), siento que por fin hay una materia en la que obtuve una licenciatura. Hablo de las cantinas y de todas esas grandes canciones y autores que son propios de estos lugares.

Tengo muchas anécdotas que contar sobre las cantinas, algunas son peligrosas y otras más bien son autodestructivas.

Mi relación con México empezó en 1992 y podría decir que comenzó en una cantina, a la cual fui la primera noche que pisé el país.

El rock latinoamericano ha dado grandes discos, grandes nombres y grandes canciones. Y me siento afortunado porque he tenido la oportunidad de conocer y compartir cartel con varios de los grandes protagonistas de esta historia, como Saúl Hernández de Caifanes, Aterciopelados, Gustavo Cerati, Andrés Calamaro, Molotov, Café Tacvba y otras tantas leyendas latinas.

BUNBURY TOCARÁ EL 23 DE MARZO EN EL VIVE LATINO, A LAS 22:35

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